
Después de veinte años trabajando como masajista, masajeando miles de cuerpos de diferentes formas, texturas, durezas y personalidades. Después de pasar por todo tipo de situaciones comprometidas, y las mujeres ya sabéis a lo que me refiero. Después de cometer muchos errores y aprender de ellos, he adquirido una gran experiencia en este campo.
